(Escrito en el Blog de Eixam)

Antes de verano, Don @despegante me sugirió la lectura del texto “De huertas y barracas a galaxias faraónicas. Percepciones sociales sobre la mutación de la ciudad de Valencia” pero por circunstancias varias, la sugerencia se convirtió en un reto, reto que hemos bautizado con #YIMBY (You’re In My Blog Yard, reclamaciones por el nombre a @despegante).

Así pues, entiendo, el retador querrá saber mi opinión sobre el texto… pero ¿al respecto de qué? ¿De los autores? ¿Del contenido? ¿De la política de grandes eventos de los últimos años? ¡¡En Valencia!! ¡Es mucho lo que se desprende de estas 27 páginas!

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Sobre los autores. Ella, Beatriz Santamarina Campos, mi maestra; él, Albert Moncusí Ferre, profesor, ambos antropólogos y residentes en Valencia… así que ¿qué puedo decir de ellos? Mi cometido es ser objetiva en este post, máxime cuando soy científica social (aka sociólogos/as, antropólogos/as, politólogos/as) pero… eh… bien, vale, de acuerdo, en otro post hablaremos de la objetividad en nuestro campo…

“La transformación de Valencia en metrópoli clónica glocalizada”

 

Sobre la metodología. Una aproximación a Valencia desde un enfoque antropológico a través de grupos de discusión ¿¡qué más se puede pedir!? Es un claro ejemplo de cómo dar voz a los verdaderos protagonistas de la historia: los ciudadanos.

Sobre el contenido. El artículo nos conduce irremediablemente hacia aguas políticas, históricas, urbanas (que no residuales), culturales, turísticas o sociales…pues estudian la percepción social de la ciudad y por lo que tratan la política, la valencianía, el turismo, el paro, la historia… es decir, lo tratan casi todo… hasta incluso la crisis económica.

“La percepción de Valencia: entre el escaparate, la opulencia
y la esquizofrenia”

 

En los últimos meses en Eixam hemos estado trabajando para el sector turístico, cosa que nos atrae en demasía, y este texto nos muestra cómo a través de la imagen que los habitantes tienen de su ciudad la recrean y configuran. Por ejemplo, si tenemos amigos o familiares que vienen a conocer Valencia ¿dónde les llevamos? y más importante ¿por qué les llevamos a esos sitios y no a otros? Dar una vuelta por la Calle del Mar, visitar la Ciudad de las Artes y las Ciencias o salir en barca a la Albufera ¿es lo mismo? ¿Qué imagen transmitimos a través de nuestros recorridos? ¿Qué imagen tenemos de nuestra ciudad? Personalmente me parece interesantísimo el tema del turismo y la construcción imaginaria -y si estiramos, incluso identitaria- de la ciudad.

Pero el núcleo en torno a la que gira el artículo es sobre la política de grandes eventos llevada a cabo por las autoridades públicas en los últimos 15 años en la ciudad y como ésto es percibido por los ciudadanos, especialmente en la coyuntura económica actual. Del texto se desprende una bipolaridad manifiesta (Valencia bonita vs indicadores socioeconómicos) que reflejan el éxito de este modelo político, pues pese a lo que está cayendo, los informantes sostienen que Valencia está más bonita que nunca ¿¡Y quiénes son los antropólogos para ponerlo en duda!?. Lo interesante del texto es que recoge la compleja -y a veces paradójica- realidad valenciana y la presenta sin reparos, sin aderezos, sin máscaras… ante su propia imagen. El fin de la Sociología y la Antropología, o al menos como me lo han enseñado a mí, es rascar la superficie para ver qué se cuece en el interior, en este caso, en la sociedad capitalina. Y me parece que estamos ante un gran ejemplo práctico.

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Mis consideraciones finales. Me parece un texto extremadamente interesante y de una calidad que, por desgracia, no abunda en nuestros días. La lectura es amena (fácil y entendible), de hecho en algunos momentos engancha cual novela blasquista (#modoironíaoff) pero el contenido me parece sublime, por lo novedoso, lo riguroso y lo esclarecedor.

No puedo más que agradecer a Don @Despegante su recomendación -y obligada lectura- y comentarle que en breve podrá recoger el guante… en su yard.

“Del llaurador al ciborg, o de la barraca al Hemisfèric”